La técnica de trasplante meniscal alogénico (utilizando un menisco proveniente de donador cadavérico) ha sido refinada en las últimas décadas. Está indicada para pacientes que sufren de un déficit meniscal que puede ser del menisco medial o del menisco lateral además de dolor en el sitio de extirpación del menisco original.

Generalmente se trata de pacientes que en los años previos se les realizo una meniscectomía (extirpación de una parte o todo el menisco) debido a una ruptura y posteriormente desarrollaron dolor en el sitio del menisco lesionado, la falta de menisco conduce a una alteración de la biomecánica de la rodilla y a la aparición de artrosis (desgaste) prematura.

Esta cirugía se puede realizar de manera abierta o por artroscopia y tiene una recuperación media de 6 meses, si bien parece un tiempo de rehabilitación prolongado, estudios previos han determinado que mejora los síntomas del paciente y retrasa la aparición de desgaste articular y por ende la necesidad de colocación de una prótesis.